El alcalde de Panamá, Mayer Mizrachi, ha aprobado una moratoria que se extenderá del 16 de septiembre al 16 de octubre, con el fin de aumentar la recaudación fiscal y hacer frente a los compromisos financieros del municipio. En una rueda de prensa realizada el 13 de septiembre, Mizrachi aprovechó la ocasión para defender su gestión y presentar un informe sobre el uso de los fondos públicos desde que asumió el cargo.
Según Olmedo Rodríguez, tesorero municipal, el presupuesto aprobado para el año fue de 325 millones de dólares, pero solo se recibirán ingresos por 198 millones, un 40% menos de lo previsto. A esto se suman deudas por 180 millones de dólares. Pese a las dificultades, el municipio ha logrado mantener un equilibrio entre ingresos y gastos, con un ingreso mensual de 8.8 millones de dólares y gastos fijos de 7 millones.
Reformas en los fondos de las Juntas Comunales
Roberto Ruiz, secretario general del municipio, explicó que en enero se presentó una demanda ante la Corte Suprema para frenar el uso de los fondos de inversión por parte de las juntas comunales. Aunque algunos concejales han solicitado 14 millones de dólares adicionales, la Corte aún no ha formalizado el levantamiento de la suspensión de dichos fondos. Ruiz también señaló que el Procurador de la Administración confirmó que no existe obligación legal de entregar estos fondos, lo que ha permitido al municipio contener el gasto público.
Mizrachi finalizó su intervención enviando un mensaje a los ciudadanos, subrayando el enfoque transparente y responsable de su administración. “Estamos trabajando para redefinir lo que significa ser panameño, con decisiones que aseguren un futuro más estable para todos”, afirmó el alcalde.