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El tráfico ilegal pone en peligro las especies en Panamá

“El tráfico ilegal de especies se ha vuelto una tendencia del crimen organizado que pone en peligro la supervivencia de animales silvestres”, advirtió la médica de la Clínica Veterinaria del Parque Municipal Summit, Diorene Smith Cabellos.

Smith Cabellos, cuenta con más de 17 años de experiencia en salud de la vida silvestre y señala que este tráfico es alentado por la tenencia de animales exóticos, procedentes de otros países, o nativos, lo cual es un delito que persiguen las autoridades a través el Ministerio de Ambiente. Advirtió que si mascotas convencionales como perros o gatos requieren de atenciones y un presupuesto, un ejemplar silvestre demanda muchas más responsabilidades, tantas, que al final termina enfermo y es abandonado.

Explicó que reprimir un animal desarrollará en ellos conductas agresivas, desnutrición y reducirá sus posibilidades de sobrevivir, más es víctima de una liberación irresponsable. “Eso no es lo que queremos para ellos”, dijo.

Rechazó que terminen enjaulados, sin poder expresarse; aves privadas de su vuelo en bandada, primates de sus vidas en colonias; anfibios y reptiles que requieren terrarios a temperaturas e iluminación especial.

Devolver animales silvestres rescatados

La veterinaria resaltó que el desarrollo urbano descontrolado ha expuesto a varias especies a una interacción involuntaria con los humanos, de las cuales salen lastimados o accidentados.
Pidió a quien rescate a un animal silvestre, que lo lleve a los centros de atención especializados donde se les pueda dar curar para luego tratar de reintroducidos a su hábitat.
“Lo ideal es atenderlos y devolverlos a su ambiente para que se reencuentren con los miembros de sus especies, gocen plenamente de sus libertades y cumplan con su propósito como seres vivos, parte de la naturaleza”, agregó.

Explicó que el bienestar físico y mental de un animal silvestre depende de un cuidador con experiencia, pues en cautiverio, tratará de liberarse, podría morder, contagiarse o transmitir enfermedades.

La doctora Smith vela por más de 200 animales que refugia el Parque Summit, resultado de decomisos, víctimas de accidentes o nacidos en cautiverio, a los que se les brinda calidad de vida replicando ambientes semejantes un hábitat al que no serán retornados porque no sobrevivirían por sí mismos.